Una auditoría a las juntas de conciliación 10 y 11 exigen los miembros de la Coordinadora Nacional de Unidad Sindical Independiente (CONUSI), en la provincia de Chiriquí.
Jaime Caballero, dirigente del SUNTRACS, dijo que las nuevas autoridades del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (MITRADEL) deben realizar esta función para que se agilicen los casos de conflictos entre patronos y trabajadores.
Caballero indicó que existe una mora judicial en materia laboral, no sólo relacionado con temas de la construcción; sino también con los trabajadores agrícolas, miembros del Sindicato de Trabajadores Agropecuarios e Industrias Derivadas (SITRAPEID) que laboran en las tierras altas.
"Queremos saber cuáles son las razones del atraso. Falta voluntad de parte de las autoridades", subrayó Caballero.
La dirigencia sindical cuestiona de igual forma la presencia dentro de la Junta de Conciliación de un funcionario dueño de una empresa, del que se presume evade la responsabilidad de inscripción al Seguro Social; entre otra serie de irregularidades.
Caballero expresó que no se pueden designar en estos puestos a personas que funjan como jueces y no tengan la suficiente solvencia moral para desempeñar estos cargos; ya que no respetan el Código de Trabajo.
"Esto nos pone realmente un verdadero obstáculo para la administración de justicia", alegó el dirigente.
Los trabajadores agrupados en la CONUSI resolvieron enviar una nota a la ministra de Trabajo, Alma Cortez, para expresar sus inquietudes y buscar los mecanismos necesarios para que se resuelvan los problemas que afronta la clase obrera chiricana en materia de justicia laboral.
También expresaron que los ciudadanos que se nombren en estas juntas deben ser evaluadas por méritos y experiencia profesional; y no por influencia o amiguismo político.