La actual zafra del tomate industrial se encuentra en su pleno apogeo, pero no anda muy bien, porque existe una gran cantidad de productores que aseguran que la producción no va acorde con lo que se esperaba.
Sin embargo, habrá que ver lo que digan los números al final, unos andan bien, otros más o menos bien y otros mal, dijo en exclusiva a La Voz del Interior, Pedro Castillo, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Tomate Industrial.
Son 250 productores de este rubro de verano, en Herrera y Los Santos. Ellos aducen que uno de los problemas es, que el año pasado fue poco lluvioso, apareciendo las plagas como: mosca blanca, gusanos, y los préstamos que llegaron tarde, aunado a que en los primeros días de enero llovió y eso afectó la floración de mucho tomate.
No obstante, tendrán que esperar hasta el final para realizar el balance total para ver si llegan a las 15 mil toneladas programadas. De no llegar tendrán que estudiar por qué no llegaron, detalló Castillo.
Añadió tener conocimiento que existen varias fincas que se encuentran en excelentes condiciones, que darán una muy buena producción.
La compañía Nestlé es la que les compra todo el tomate que se produzca hasta el 30 de abril sin ningún problema, afirmó el productor tomatero.
FUTURO INCIERTO
Pedro Castillo advirtió que para el próximo año, no hay nada seguro: “todo es incierto, no hay ninguna seguridad por parte de nadie. Ni por parte de las autoridades nacionales, ni por parte de la empresa”.
Adelantó que ellos (productores) esperan que después del 30 de abril, poder sentarse a conversar con la compañía Nestlé para tratar sobre el futuro del tomate, y entonces, “ver cuáles son las acciones que vamos a seguir en razón de que muchos productores tienen tierras arrendadas, y eso se tiene que dar mucho antes del mes de agosto, porque si no, el productor tiene que ver a qué otra actividad se acoge”.
UNA CATASTROFE
Pedro Castillo vaticina que, “si desaparece la producción del tomate industrial en Azuero, no será una catástrofe sólo para los 250 productores; sino una catástrofe para Azuero y alrededor de unas 10 mil personas”.
Para el presidente de los tomateros, ocurrirá como cuando era niño, “que nuestros padres se sentaban bajo los árboles a diario a conversar, porque no tenían ninguna actividad de verano que hacer; pero tenían arroz, yuca, ñame, maíz y frijoles -esa era la comida del verano- pero en estos tiempos eso no se da”.
ANTES DE AGOSTO
Esto hay que tratarlo con mucha seriedad, donde deben involucrarse todos los sectores para tratar de dar una solución; “si no es el tomate, es otro rubro", manifestó Pedro Castillo.