Una Francia espesa, sin dinamismo ni creatividad, cayó 3 a 1 en el primer partido de clasificación para el Mundial de fútbol de Suráfrica 2010 ante una eficiente Austria que aprovechó sus ocasiones de gol a balón parado.
La rejuvenecida Francia de Raymond Domenech volvió a naufragar en Austria, el escenario por el que pasó la pasada Eurocopa con un fútbol sin chispa y del que se despidió sin dejar grandes recuerdos.
Austria también se presentaba renovada después de pasar a la historia como el peor anfitrión de la Eurocopa.
Los nombres son casi los mismos, pero la actitud, la motivación, la disposición táctica y la madurez que ahora demuestran los alpinos es totalmente distinta.
El responsable del cambio es el nuevo seleccionador, el ex técnico de la República Checa Karel Br ckner, se deja ver en la disciplina táctica, la mayor agresividad y, en general, la impresión de que el combinado alpino tiene pocas virtudes, pero ha aprendido a aprovecharlas.