El robo de cables telefónicos parece ser un mal de nunca acabar que cada vez afecta a más comunidades, como a los residentes de La Pita Haya en La Mitra de La Chorrera, comunidad que ya tiene 2 años sin teléfonos y la empresa telefónica dijo que no los pondrá más.
Cuando empezó la fiebre del cobre y con ella el robo de los cables telefónicos, en La Pita Haya apenas demoraban 3 días, pero los recibos siempre llegaban, pero después se hizo tan seguido que la empresa telefónica decidió no instalar más la línea.
El mes de febrero del año pasado fue la última vez que esta comunidad tuvo línea telefónica, pero de aquí en adelante han tenido que acostumbrarse a vivir prácticamente incomunicado, sujetos sólo al celular porque tampoco tienen teléfonos públicos.
Aunque nunca las autoridades dieron con los responsables de este ilícito, la comunidad asegura que se trata de jóvenes de mal vivir que conviven diariamente con ellos y que son los mismos que se encargan de romper las luminarias para poder hacer sus fechorías.