En medio de un palo de aguacero, la legisladora Haydeé Milanés de Lay se declaró ayer en huelga de hambre, en los predios del Tribunal Electoral, para denunciar que la quieren despojar de la curul del circuito 5-1.
Biblia en mano, la ahora arnulfista alega que el fiscal electoral, Gerardo Solís, mantiene una "persecución" en su contra.