Un informe obtenido de parte de un alto mando de la Policía Nacional, reveló que el cabo Edilberto Escudero, de 24 años, falleció por complicaciones en la circulación sanguínea y por un paro cardíaco tras varias horas de estar hospitalizado.
Escudero recibió el viernes un disparo en el pecho, cuando atendía un caso de violencia intrafamiliar, donde resultó abatido Denis Alexis Sosa.
La fuente aseguró que la bala penetró en el costado derecho del policía a la altura del pecho y recorrió varias órganos, entre ellos, el baso, los pulmones, el hígado y los riñones. Perdió sangre y se le hizo una transfusión de seis pintas.
A Edilberto Escudero le decían Benjamín. Era el mayor de cuatro hermanos. Por mucho tiempo vivió en Las 500 de San Miguelito con sus padres, pero luego su madre se mudó a Villa Grecia y él iba donde ella.
Los familiares del policía no quisieron dar declaraciones, sin embargo, vecinas de Escudero lo describieron como una gran persona que asistía a la iglesia Hossana y dictaba clases bíblicas todos los jueves en las noches a los moradores. Además llevaba a los niños del barrio a las posadas. No era fiestero.
Carmen Martínez, vecina, dijo que Escudero "era tan bueno que no parecía policía". Lo describió como una persona muy amable.
Por cuatro años laboró como miembro de la institución. Primero trabajó en el área F de Parque Lefevre y posteriormente es trasladado a la zona de El Chorrillo, donde se desenvolvía como ciclista.
Los directivos de la Policía Nacional se apersonaron temprano en la mañana de ayer a la casa del policía muerto en cumplimiento del deber. Al lugar acudió el director de la Policía Nacional, Carlos Barés.