Un cabello casi plateado, la experiencia buena o mala que dejaron los años y el deseo de seguir cosechando el amor son algunas de las características de las que gozan cientos de adultos mayores.
Para la juventud de hoy en día, es casi inimaginable una relación íntima entre personas que superan los 60 años, pero si se tiene el deseo, todo se puede. Aplica igual que en nuestros tiempos, en los que el amor, el deseo, y la pasión juegan un papel importante en la intimidad.
Aunque, es lógico que no se puede entrar en detalles de cómo lleva a cabo la intimidad el adulto mayor, hombre y mujer, ellos también sienten, por lo que disfrutar de una compañía que los llene de caricias, atenciones y unas que otras sorpresas es suficiente para ellos.
En este sentido, los detalles juegan un papel fundamental porque, por error, se cree que a cierta edad ya no importan los presentes.
No hay que olvidar que los adultos mayores son parte de nuestra sociedad, ellos sienten igual que el resto de los mortales, por lo que su piel arrugada y manchada, sus canas y sus pasos lentos no deben ser motivo para estereotiparlos. Ellos también pueden amar. No importa si se han dado una, dos o tres oportunidades, lo ideal es que no pasen sus días solos, sólo refugiándose en los recuerdos o en aquellas líneas que escribieron en eso que hoy se llama diario.
SIMPLEMENTE CONMOVEDOR
Quizás la situación antes planteada no la he visto en mis abuelos ni mucho menos en mis vecinos, pero sí en algunas parejas ya véteras, agarraditas de la mano, que veo cuando voy a comer un helado, las salidas al "mall", incluso, cuando estoy en la fila para comprar boletos de cine.
Llegar a la tercera edad, como dicen muchos poemas, puede significar el fin de algunas cosas, pero también la renovación o el comienzo de muchas otras...