El ejército israelí anunció la conclusión de la operación "Arcoiris" en Rafah, en la franja de Gaza, que en los últimos siete días provocó la muerte de 43 palestinos y la destrucción de decenas de viviendas.
Esta operación tenía como objetivo destruir los túneles para el contrabando de armas entre Egipto y Gaza.
Diez mil palestinos habían salido a las calles de Rafah para protestar por esta operación, mientras que los cuerpos de 16 víctimas eran trasladados en ambulancia a la mezquita de Al Awda.