Al congelar alimentos, especialmente carnes, se debe tener en cuenta las condiciones en las que se produce el sacrificio del animal.
La congelación disminuye el desarrollo de microorganismos, así como las reacciones enzimáticas que provocan el deterioro de los alimentos.
Las bajas temperaturas disminuyen la velocidad de reacciones químicas comunes en todo organismo vivo, sobre todo menores a 0°C, es por eso que este método se ha utilizado tanto para la conservación de alimentos.
Antes de llevar a cabo la congelación del alimento hay que garantizar la calidad del mismo, esto se conseguirá de varias formas dependiendo del alimento y técnica de congelación.
En caso de vegetales hay que actuar adecuadamente en la refrigeración, mientras que en animales si bien la situación ideal sería aquella en la que no fuese necesaria. En caso de necesitar refrigeración hay que llevarla a cabo en las condiciones óptimas para garantizar el producto.
Es necesario que tomen estos consejos para que al momento de preparar los alimentos estén en las mejores condiciones.