El nuevo gobierno está inmerso en la consecución de recursos adicionales para hacerle frente a sus promesas de campaña. Con las finanzas del Gobierno Central que desde ya registran un déficit de casi 500 millones de dólares, el Ministerio de Economía y Finanzas hace sus revisiones para ubicar posibles fuentes de nuevos ingresos.
La mirada inicial fue recuperar la morosidad que mantienen varios concesionarios en las áreas revertidas y ahora los ojos están puestos sobre la Zona Libre de Colón y los viajeros.
Para la Zona Libre, la intención es subir el canon de arrendamiento de los terrenos y de los edificios que ocupan los más de 2, 500 usuarios de esa área franca. La idea es lograr unos 38 millones de dólares adicionales con esta medida.
De igual modo se pretende elevar en 10 balboas la tasa que se les cobra a los viajeros cuando salen por el aeropuerto de Tocumen, pero también aplicar un cobro a los pasajeros en tránsito, que hoy día no hacen ningún aporte por el uso de las facilidades de esa terminal mientras esperan llegar a su destino. Se estima que estas medidas pueden generar unos 20 millones de dólares al Tesoro Nacional.
Es lógico que los sectores afectados levanten voces de rechazo, pero la realidad es que los asalariados, son los que tradicionalmente han cargado con el peso de los impuestos en Panamá y ya no soportan más.
Entendemos que la crisis global ha golpeado fuertemente las reexportaciones de la Zona Libre, pero se hace necesario que hagan los ajustes necesarios para dar mayor aporte al país que ofrece sus facilidades para el comercio mundial.