A una la mataron y la dejaron abandonada entre un herbazal en Gamboa.
La otra fue encontrada también sin vida, en un paraje solitario lleno de maleza, vía a la comunidad turística de Veracruz. A la primera la ultimaron de un tiro en la cabeza.
A la otra le arrancaron la vida mediante estrangulación, según los informes médicos.
El cadáver de Gamboa fue hallado tres días antes del segundo, en Veracruz. Ambos casos se conocieron en la Policía por llamadas telefónicas. La primera fue anónima y la segunda de un conductor, cuyo auto se averió en la vía.