El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, abogó ayer por la posibilidad de que su organización pueda intervenir en un país en crisis sin haber sido invitada previamente como lo exige hasta ahora la Carta Democrática Interamericana.
"Se trata de ver de qué manera podemos adelantarnos a los riesgos para hacer más efectiva la Carta Democrática Interamericana", afirmó Insulza en una rueda de prensa previa a la Asamblea a la Asamblea General de la OEA, que se celebra desde hoy al martes en Fort Lauderdale (Florida, sureste). "La OEA no tiene ninguna posibilidad hoy día, sin invitación, de decir que hay algún peligro en algún país, que hay un problema en algún país", lamentó.