¡Santísima Trinidad.. iluminanos!
¡Salvamos de la eliminación e ilumina a nuestro técnico y equipo!
Ayer fue un día para olvidar y llorar. Hoy es de esperanza y de reflexión.
Desilución, desencanto y tristeza experimentó Panamá, luego de la derrota 2-0 ante Trinidad y Tobago.
Nuestra oncena jugó un partido para el olvido, se olvidó del manejo de la pelota y de la marca, lo que a la postre nos costó. Le dimos vida a un moribundo como Trinidad y Tobago, para amanecer hoy en el fondo de la tabla con 2 puntos.
Los milagros existen.. el miércoles contra Estados Unidos.
¡A rezar todos!