El nuevo presidente de Irak declaró que la insurgencia podría ser extinguida inmediatamente si las autoridades hicieran uso de milicias como las kurdas y chiita musulmanas.
Jalai Talabani dijo que esa medida sería más efectiva que esperar a que las fuerzas iraquíes tomen el control que hasta el momento está en manos de la coalición que dirige Estados Unidos.
El mandatario dijo también a la cadena británica BBC que no firmaría una sentencia de muerte contra el capturado ex líder Saddam Hussein y advirtió que cualquier intento de imponer un gobierno islámico en Irak dividiría el país.
"NO FIRMARE"
Si Saddam Hussein va a la horca, como sus enemigos dicen que debe ser, su sentencia de muerte tendrá que ser endorsada por la nueva presidencia iraquí. "Personalmente, no, yo no lo firmaría", afirmó.
Entretanto, las fuerzas de seguridad iraquíes irrumpieron el lunes en una población ubicada al sur de Bagdad, después que se difundieron informes de que milicianos sunitas habían secuestrado a unos 100 chiítas del área.
Sin embargo, residentes y clérigos sunitas expresaron que funcionarios del gobierno habían exagerado las versiones con el fin de restablecer el control en este peligroso sector del país.