El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, aseguró que renunciará a la jefatura del Estado si la Asamblea Constituyente concede la amnistía a acusados de supuesta "sedición" durante una protesta de pobladores en la provincia petrolera de Orellana.
Correa, en su habitual espacio radial sabatino, afirmó que si se declara una amnistía para esos presos, renunciará a la Presidencia, pues dijo que no permitirá "que siga la impunidad, que siga el mismo cuento de siempre".
El jefe del Estado también se defendió de la queja de varios grupos de derechos humanos que han advertido de supuestos "abusos" represivos por parte de militares, para sofocar la protesta en el sector de Dayuma, en la provincia amazónica de Orellana.
Asimismo, dijo que, aparentemente, la protesta en Dayuma podría haber sido manipulada por el opositor Partido Sociedad Patriótica (PSP), que lideran el ex gobernante Lucio Gutiérrez y su hermano Gilmar.
Correa hizo un llamamiento a sus correligionarios en la Constituyente, que ocupan 80 de los 130 escaños, para que, según dijo, "no caigan en esta trampa de un mentiroso como Gilmar Gutiérrez (también asambleísta), que quiere imponernos una agenda" de discusiones en la Asamblea.
"Si declaran amnistía, muy bien, me voy a mi casa y nombren a otro Presidente que siga con esta alcahuetería de siempre, porque yo no me prestaré para que el país siga en la misma anarquía que nos ha hecho tanto daño", añadió.
"No caigamos en ingenuidades, en romanticismos", remarcó el jefe del Estado.
INSTALACION: ASAMBLEA
30 de noviembre inició el trabajo de la Asamblea Constituyente ecuatoriana, la cual tiene como principal trabajo la redacción de una nueva Carta Magna que fortalezca los renglones sociales, económicos y políticos de Ecuador.
La Constituyente ha sido ampliamente criticada por el Congreso que fue cerrado.