Estudiantes, docentes y personal administrativo del Instituto Comercial Panamá no pudieron iniciar clases en su plantel, porque aún no se había concluido con el proceso de descontaminación y limpieza por fibra de vidrio.
La situación causó molestia entre el estudiantado, ya que el plantel se encontraba totalmente sucio, con las ramas de los árboles en el área de estacionamiento y candados en las puertas.
Eduardo Castañeda, vocero de los educadores, exigió que para bienestar de la comunidad educativa antes de ordenar la apertura, se debe obtener la certificación que avale que las instalaciones están libre de material.
Afirmó que como docentes responsables, continuará brindado las clases a los estudiantes de manera presencial y por módulos en los distintos locales y centros escolares asignados.
