La paila con agua caliente le cayó encima. Saray Osiris Núñez, de tres años, murió luego de que el fogón con una olla de agua caliente cayera sobre su cuerpo.
La pequeña estaba con sus padres y otros tres hermanitos en su casita de pencas, en la comunidad de Santa Lucía de Donoso en Colón. De repente, una fuerte brisa se llevó parte del techo de la casa y la cocina y con ello el fogón, las piedras y la olla llena de agua caliente sobre la niña.
Antonio Núñez, padre de la niña, comentó que la casa se les cayó, la fuerte brisa reventó una viga y el fogón le cayó encima a él y a su hija. A pesar de los esfuerzos del padre para que su hija no se quemara fue inútil, y sólo le quedó sacarla de debajo de los escombros de la casa y el fogón.
El hecho se registró el jueves, en horas de la noche, pero no fue hasta ayer, cuando los padres de la niña pudieron sacarla hasta el cuarto de Urgencias del Hospital de Penonomé, gracias a los helicópteros de la Mina Petaquilla.
Nirisabel Flores, encargada del cuarto de Urgencias del Hospital de Penonomé, indicó que la menor de tres años llegó con quemaduras de agua caliente y de las brazas del fogón que le cayeron encima.
La niña llegó al cuarto de Urgencias con un paro cardíaco producto de las fuertes heridas en todo el cuerpo. Tenía quemaduras de aproximadamente 35 a 40% de superficie corporal, tenía edemas, y a pesar de la atención que se le brindó, la menor murió, porque había pasado mucho tiempo después que se quemó.
El padre de la menor tiene quemaduras profundas en sus piernas, pero está estable; mientras que la madre de la niña Diamantina Valdés, sufrió quemaduras en la espalda y golpes en el cuerpo.
