"La maté porque me era infiel y yo la quería mucho", dijo a EPASA Vladimir Hernández Sánchez, criminal confeso de Osiris Morales, asesinada de 13 puñaladas en la pasada semana.
El homicida se entregó voluntariamente a los funcionarios de la Subdirección de Información e Investigación este 25 de diciembre, en Navidad, porque sus familiares le pidieron que rindiera cuentas con la justicia y no querían verlo preocupado.
En la mañana del sábado el asesino reconstruía los hechos de cómo mató a la mujer y el recorrido que hicieron ambos aquel fatídico día en el sector de La Medalla Milagrosa, corregimiento de Cristóbal.
Muy sereno, Vladimir explicó que Osiris "era mentirosa y no podía soportar que me fuera infiel, por eso me llené de rabia aquel día y decidí quitarle la vida".