Es probable que si usted ve esta foto, se dará cuenta de quién se trata o posiblemente no los conozca. Pues en el Museo de Penonomé se encuentran los "Rostros de mi pueblo". Gente común y corriente, que son importantes porque representan una labor en mi Penonomé.
En el museo de Penonomé hay mucho por ver, sin embargo , algo que ha llamado mucho la atención es precisamente los "Rostros de mi pueblo". Se trata de fotografías 81
2 x 11 que están en blanco y negro y que fueron tomadas hace más de 30 años a diferentes personas que llamaban la atención del fotógrafo.
El profesor Olmedo Domingo (q.e.p.d.), siempre se preocupó por la cultura y las cosas que hacen de Penonomé un pueblo lleno de tradiciones, decidió recopilar estas fotos de gente común desde hace años, para luego mostrarlas y que esto llamara la atención de los visitantes y propios de Penonomé para recordar cómo eran antes.
Muchas personas ya han muerto, sin embargo, hay quienes aún viven y se han logrado reconocer, otro que has sido vistos por sus hijos si se han llevado la sorpresa; tal es el caso del señor Ibarra, el raspadero del pueblo. El ya está muy viejo y casi no sale de su casa, pero su hija y nieto fueron hasta el museo y confirmaron que se trataba de su familiar que vendía raspados, profesión que ejerció por más de 40 años.
Otro de los rostros de mi pueblo es el capitán Rodolfo Arosemena, el electricista del pueblo, quien actualmente trabaja en la Oficina de seguridad de los bomberos de Penonomé. Todos lo han reconocido porque no ha cambiado mucho y el orgullo que sienten familiares y amigos es muy grande.