martes 8 de junio de 2010 

S E C C I O N E S

EPASA EN LINEA

PANAMA AMERICA

DIAaDIA EN LINEA

REVISTA SIETE!


inicio

al cierre

nacional

política

opinión

economía

el pueblo habla

provincias

nuestra tierra

sport

el mundo

viva

sucesos


ediciones anteriores

buscador de noticias

clasificados EPASA

otros sitios de interés

CRITICA
 


  VIDA NUEVA


Share/Bookmark

¿Hasta cuándo se tiene intimidad?

Kenibeth Ríos P. | Vida Nueva, Crítica en Línea

Difícil de imaginar, pero la intimidad es un proceso de la vida que desaparece conforme vayan pasando los años, eso sí, dependiendo del tipo de individuos que sean.

Decimos esto por una anécdota que escuchamos en una de esas visitas al médico, una señora, que a penas superaba los 55 años, o por lo menos eso es lo que aparentaba, contaba a otra del mismo rango, o un poco más de edad, lo que le sucedía desde hacía unos años con su esposo, más bien lo describía como el papá de mis hijos, yo rogaba que mi turno no llegara porque la conversa de las dos señoras iba para largo. Me sentí intrigada, porque se supone que cuando las parejas se unen es para siempre y después de tanto años juntos lo han vivido todo, incluso en materia sexual.

La cincuentona le decía a su recién conocida, que ella no tenía deseos de intimar por el trato que éste le daba, ya no era el mismo hombre amoroso con el que se había unido y eso provocó un alejamiento. La oyente le contestó: "yo tampoco tengo nada, pero a diferencia tuya mi marido me trata bien, pero yo no puedo lograrlo".. En ese instante vino a mi mente una interrogante: ¿cuándo se pierde ese deseo de intimar?

Los expertos consideran que la la idea de que la vida sexual es algo "para jóvenes", que se inicia en la pubertad y que desaparece en un momento dado de nuestra madurez, no sólo es incierta, sino que constituye una creencia absurda que condena a quienes la tienen interiorizada a renunciar a experiencias gratificantes, entre ellas el sexo.

A lo largo de nuestro ciclo vital, se producen muchos cambios relativos a nuestra sexualidad: la forma y tamaño de nuestros rasgos sexuales, la concentración de determinadas hormonas asociadas, nuestro comportamiento sexual.. Pero eso no significa que la sexualidad aparezca o desaparezca, simplemente evoluciona y se transforma.

Sin embargo, muchas personas que superan los 50-60 años tienden a suponer que su sexualidad irá remitiendo, que ya no es para ellos. Nada más lejos de la realidad, porque la necesidad de relacionarse con otras personas, de expresar sentimientos, de recibir afecto, no tiene edad y no se pierde.

Ahora, hay que tomar en cuenta que muchos factores influyen en el hecho de que un adulto mayor no quiera o no pueda tener sexo:

  • La salud física o mental: "achaques" propios de la edad
  • La falta de pareja.
  • La monotonía de las relaciones, normalmente asociada a dificultades de comunicación.
  • La aparición de actitudes inhibitorias asociadas al alejamiento de los cánones de belleza social y al sentimiento de no sentirse atractivos/as.
  • El más que probable estrés asociado a la pérdida de la pareja, al deterioro de la red social y del nivel socioeconómico.

Las personas mayores que manifiestan, a través de su comportamiento, su interés sexual reciben el calificativo peyorativo de "viejos verdes" y el sentimiento de culpa resultante les lleva a inhibir cualquier expresión asociada a sus deseos.

Claro, cada individuo debe saber hasta dónde debe llegar, tomando en consideración su edad y su condición física.

 

    TITULARES

Otras cosas históricas

Beneficio del menú europeo

Nutrición en los diabéticos

Cuidado dental en la tercera edad

El peligro de lo que tomas



linea
linea gris
 

   copyright © 1995-2009, CRITICA EN LINEA
todos los derechos reservados