Rodeada de 18 millas de playa con arena blanca y separada por un estrecho canal de Isla del Rey, encontramos Isla Vivero, a solo 15 minutos, por avión, de la ciudad de Panamá.
Una de las más hermosas joyas del Archipiélago de las Perlas, la isla Viveros, se destaca del resto no solo por sus playas solitarias y su mar turquesa, sino también por su abundante vegetación.
Un lugar perfecto para pasear los jubilados o simplemente descansar después de una semana de ajetreo.
Una vista envidiable, puede disfrutar tomando sol, nadando, haciendo algo de scuba o snorkelling o simplemente observando la maravillosa naturaleza a su alrededor.
Toda la región es un paraíso para pescadores deportivos, buzos y amantes de los deportes acuáticos. Las transparentes aguas del archipiélago, que se asemejan a las de la costa Caribe, son el territorio del Marlin Azul, el Marlin Negro, el Pez Vela, el Pargo y muchas otras especies. Está a sólo minutos de los populares resorts de Isla Contadora y no lejos de Bahía Piñas, uno de los centros de pesca deportiva más cotizados del mundo.
Pero los amantes de la naturaleza, observadores de vida y pájaros se sorprenderán en esta isla que se encuentra en la zona de bosque húmedo tropical con árboles de más de 20 metros de altura y una gran diversidad de especies arbóreas. Existen cuatro tipos de bosque: los mangle, bosque secundario bajo, bosque secundario de malagueto y bosque secundario alto.