Tremendo susto se llevaron los vecinos del viejo inmueble condenado 1010 de la calle 11 Callejón Martínez, en la ciudad de Colón, cuando el pasado sábado en horas de la tarde se derrumbó un pedazo del balcón de concreto en el segundo alto.
Las estructuras del balcón quedaron esparcidas en el piso luego de caer de una altura aproximada unos 14 pies, quedando parte de los escombros sobre el tendido eléctrico que pasa por el lugar provocando la interrupción del suministro de electricidad por espacio de dos horas.
La caída de la estructura causó una explosión que atemorizó a todos, pero ocasionó una tragedia mayor.
De inmediato los moradores del caserón mostraron su preocupación ante el grave problema que los aqueja ya que temen que un día las paredes y pisos cobren la vida de uno de sus familiares, así lo manifestó Zuleika Gemís, que reside en el apartamento cinco.
"Damos gracias a Dios que en ese momento no se encontraba ningún niño ni adulto", indicó Geims, ya que con frecuencia los infantes utilizan esta área para jugar.