No para todo el mundo el agua lluvia en temporada seca representa una bendición.
El exceso de afecta algunos cultivos que se acostumbran a sembrar y cosechar durante el llamado verano panameño.
Siendo el sueño uno de los factores más importantes a tener en cuenta a la hora de cuidar nuestras plantas es esencial que exista el apropiado balance es decir 50 % de sólidos, 25 % de líquidos y 25 % de aire. Se considera a un suelo saturado cuando la mayor parte de sus macroporos (los que permitirán la percolación del agua).
Cuando los macroporos están saturados de agua causa la ausencia de oxígeno en el suelo ocasionando, en la mayoría de las plantas, una asfixia celular a nivel radicular, perdiendo funcionalidad sus raíces y provocando el decaimiento de las plantas.
Las hortalizas de hoja como culantro, lechuga, repollo, apio son las más afectadas cuando llueve a destiempo, debido a que estos productos son vulnerables a los aguaceros y rápidamente sufren las consecuencias.
Otros productos que se pueden ver afectados son los tomates y el chile dulce, melón y sandía por que son propios de la época.
Además el exceso de agua en el suelo puede traer otro problema que es la pudrición de las semilla.
El problema se acentúa en la región del Arco Seco, las provincias panameñas de Herrera, Los Santos y Coclé, así como algunas áreas de la de Veraguas, donde se acostumbra sembrar cultivos delicados como arroz, piña, frijoles y caña.
De no tomar los debidos correctivos los cultivos pueden verse perjudicados por plagas (hongo y ácaro), enfermedades y otras alteraciones, que se presentan ante la inminente humedad, que aparecen en los surcos, el corto periodo de cultivo y la acumulación de agua dentro de las hojas.
RECOMENDACIONES
Debemos tratar de sembrar en pendientes que permitan el escurrimiento de agua hacia afuera. De no ser posible, debemos construir algún tipo de drenaje que saque el agua de la superficie del suelo.
Si el problema de exceso hídrico se presenta en deficiencias de hierro es recomendable fertilizar con quelatos de hierro.
Hacer un análisis de ph y salinidad para saber si existen desviaciones significativas de los valores óptimos del suelo para corregirlos.