La calamidad nuevamente hizo un alto en el corregimiento de Curundú, esta vez en el sector S de La Caseta donde un voraz incendio consumió una veintena de precarias viviendas, conocidas como barracas.
Alrededor de las 3:30 de la tarde de ayer sábado el Cuerpo de Bomberos de Panamá recibió la alerta sobre el desarrollo de un incendio en La Caseta, a pocos metros donde funciona la Junta Comunal del lugar.
Inmediatamente se desplazaron al sitio cinco carros de extinción de incendios, dos ambulancias, un vehículo de la Compañía de Salvamento, así como personal del Sistema Nacional de Protección Civil, unidades de la Policía Nacional del servicio regular y del Control de Multitudes.
Al llegar al sitio, las incontrolables llamas avanzaban sobre las viviendas de madera y otros materiales precarios, las que iban cediendo una a una, por lo que se procedió a arrojar agua sobre las que aún no habían sido afectadas para así evitar el avance del siniestro.
En total entre 20 y 25 de estas casas fueron afectadas directamente por el fuego, por el humo y el agua.
Un censo preliminar de la Junta Comunal, y el Ministerio de la Vivienda da cuenta un aproximado de 163 personas que lo han perdido todo.
En medio del incendio se produjo una balacera que no dejó heridos, pero sí pánico entre los que allí estaban.
También en medio del caos por esta tragedia, los delincuentes se dedicaron a robar a las personas que estaban por el sitio.
Informes preliminares revelan que el origen del fuego pudo darse en una de las residencias, donde se dedicaban a preparar frituras para la venta.
Al parecer, la persona que se dedicaba a estos menesteres se quedó dormida, y no se dio cuenta cuando el aceite se prendió, y alcanzó rápidamente las paredes y techo.
Dos personas resultaron heridas en este hecho, una de ellas por quemaduras, y un bombero por la caída de un objeto contundente.