"Iba abrir la puerta de mi vehículo cuando sorpresivamente escuché la primera explosión. Cuando observé a mi derecha iba pasando el conductor del camión repartidor de gas; todo su brazo derecho estaba quemado", narró uno de los colaboradores del Hotel Marriott.
"Intenté mover mi auto, sin embargo, en la segunda explosión fue imposible, ya que los vehículos empezaron a incendiarse, por lo que decidí irme de ahí para salvarme", añadió.
Otro colaborador del hotel, quien labora en el restaurante, explicó que en la segunda explosión los huéspedes se asustaron y "todos decidimos salir del edificio".