Decenas de miles de personas se han visto afectadas en lo que va de año por las intensas lluvias que azotan a Latinoamérica, desde Argentina hasta México, y que han dejado desde finales de diciembre, unos tres centenares de muertos.
Mientras Venezuela, Colombia, Paraguay y la Sierra Central de Ecuador están afectados por la sequía, Perú, Bolivia, Brasil, México, Argentina, Uruguay y la costa ecuatoriana han sufrido deslizamientos de tierra, desbordamientos de ríos e inundaciones que han obligado a evacuar a miles de personas y a declarar amplias zonas en emergencia.
El país peor parado hasta el momento ha sido Brasil, con más de 201 muertos y más de 80.000 afectados desde el inicio del verano austral, en diciembre.
Según un informe facilitado a EFE por la Defensa Civil Nacional, los estados más afectados son los de Río de Janeiro, donde 84 personas han perdido la vida, y Sao Paulo, con un balance de 74 fallecidos.
En Perú, los fallecidos a causa de las lluvias ascienden a 26, siete personas están desaparecidas y más de 20.000 han resultado damnificadas, especialmente en las regiones sureñas de Cuzco y Puno.
En la vecina Bolivia, las autoridades han reportado 15 fallecidos, 36.163 familias afectadas y 8.572 hectáreas de cultivos dañados en ocho de sus nueve departamentos por inundaciones, derrumbes y la crecida de ríos.
También en Uruguay, las crecidas de los ríos Yi y Negro, en el norte del país, por la recientes lluvias hicieron que cerca de 5.000 personas tuvieran que ser evacuadas.
En Argentina, unas 1.500 personas fueron evacuadas en las provincias de Santa Fe, Corrientes y Entre Ríos, en el noreste del país, por las intensas lluvias que provocaron el desbordamiento del río Paraná.
En el otro extremo del continente, México fue golpeado en los últimos días por un temporal que ha causado al menos 43 personas muertas y 14 desaparecidas y se espera que a lo largo de esta semana, las fuertes precipitaciones puedan volver.