Antes de que subiera el Gobierno de Martín Torrijos, me buscaron unos conocidos de la lucha contra la dictadura narcomilitar.
Querían convencerme para formar los llamados "Comités de Defensa de la Democracia". Ellos temían que el torrijismo en el poder quisiera volver a la dictadura.
Les dije que "yo luché contra una dictadura para conseguir la Democracia. Ahora no voy a pelear contra la Democracia. Los políticos civilistas tienen la culpa por no lograr el triunfo en las elecciones".
Pensé en eso el otro día, cuando la Cruzada Civilista revivió y realizó un mitin contra el autoritarismo del presidente Martinelli.
Esto es algo que yo he soñado en mis escritos hace tiempo. Además, se veía venir por la personalidad de Martinelli. Está acostumbrado a mandar en supermercados. Eso no es igual que administrar un país en forma democrática.
Pregunto, ¿por qué el resto del famoso movimiento contra la dictadura no se manifestó contra actos negativos de doña Mireya y Martín Torrijos?
Además, creo conveniente analizar desde un punto de vista sociológico, el fenómeno llamado "Cruzada Civilista".
En primer lugar, la idea no surgió aquí. Ya en Filipinas un movimiento parecido derrocó al dictador Ferdinand Marcos.
Es "leyenda urbana" aquello que un asesor norteamericano que estuvo en esa lucha, vino a Panamá para promover la Cruzada.
Históricamente esta resistencia pacífica se originó en la India. Ghandi fue su líder. Logró derrocar al imperio inglés y conseguir la independencia de su patria.
Añada otro. Un enemigo poderoso logra unir a diferentes elementos en su contra. Eso pasó con Noriega...
También está el llamado "detonante". Las confesiones del coronel Roberto Díaz Herrera sobre los desmanes de la dictadura. Ellas fueron importantes para el triunfo de los pañuelitos blancos y el toque de pailas.
No puedo vaticinar qué destino tendrá un movimiento de las fuerzas cívicas contra el autoritarismo de Martinelli.
Pero que la ex candidata del PRD (partido de la dictadura) fuera a esa manifestación, tuvo efecto negativo.
Balbina "choteó" el movimiento de la Cruzada, han dicho varias personas.
Es una lástima que el Presidente elegido por el sesenta por ciento de los panameños, en menos de un año, esté decepcionando a muchos panameños.
Realmente no queremos otro dictador, sea de uniforme o camisilla...