Un aliado cercano del presidente Pervez Musharraf asumió el sábado como nuevo primer ministro de Pakistán, un día después de que el parlamento lo eligió, pese a un boicot de la oposición.
Al lado del general Musharraf, en el palacio presidencial de Islamabad, Shaukat Aziz, ex ministro de finanzas, rindió juramento ante prominentes funcionarios, oficiales y legisladores.
El sábado, más tarde, tendría que recibir el voto de confianza del parlamento, considerado como un mero formalismo.
Aziz, de 55 años, trabajó 30 años como ejecutivo de Citibank, antes de ser nombrado ministro de finanzas, en 1999, cuando Musharraf tomó el poder mediante un incruento golpe.
Sereno y talentoso en su trato con la prensa, Aziz es reconocido por reformar una economía sumamente afectada por las sanciones internacionales, impuestas después de que Pakistán realizó ensayos de armas nucleares en 1998.
El relevo de primer ministro no afectaría las políticas cruciales, como el apoyo dado por Pakistán a la llamada guerra contra el terrorismo que encabeza Estados Unidos o el proceso de paz con la rival India.
Sin embargo, algunos grupos opositores han considerado que la maniobra política para que Aziz fuera elegido representó una afrenta para la democracia, y una prueba de que Musharraf es la fuerza dominante en la política, pese a la restauración del parlamento, luego de las elecciones del 2002.
Tras el juramento, Aziz dijo que la transferencia pacífica de poderes representaba una muestra de que la democracia madura en Pakistán''.
Es el comienzo de una nueva era para construir un Pakistán más fuerte'', dijo el primer ministro a la prensa.