Un error lo llevó Haití. Pasó la experiencia más terrible que puede tener un ser humano; sin embargo, aprendió que no se debe esperar, porque el mañana es hoy.
Es el mensaje de "Sobreviví al terremoto" , una obra de Ricardo Puello, en que narra su experiencia durante el terremoto que sacudió Haití, en enero pasado, el cual dejó más de 200 mil muertos, destrucción y desesperanza en el empobrecido país.
El sismo es visto desde la óptica de su autor, quien decide emprender un peregrinaje de 27 horas para llegar a la frontera de República Dominicana y de allí trasladarse a Panamá. Dejar atrás las escenas de dolor, llanto y pérdida que palpó y regresar a su hogar.
La obra se divide en cuatro capítulos, cada uno representa las distintas etapas pasadas por Puello y otros dos panameños, un indostán y una colombiana, quienes se aliaron y decidieron que permanecerían juntos pasará lo pasará.
DESDE "EL MOMENTO" HASTA "LA SALVACION"
El libro se inicia con "El Momento". El instante en que la tierra comienza a sacudirse y el miedo a morir se intensifica. Puello, junto a César Barría, comparten esta experiencia en la habitación de un hotel de Puerto Príncipe. El autor narra una imagen dantesca al salir del hotel y encontrarse con las calles cubiertas de sangre, cadáveres y gente llorando. Pero también describe la zozobra que experimentó cuando una segunda réplica del sismo estremece la capital haitiana.
El pensamiento de Puello es el mismo que el de hace 8 meses. "Las réplicas continuaron y uno piensa que va a ser igual de destructiva que la anterior".
El autor explica que al llegar la noche, se inicia otra zozobra. Desconocían qué hacer, dónde pasarían la noche, qué iba a ser de ellos, y las decisiones que deben asumir para sobrevivir. Cada uno de esos pasajes forman parte de "La Incertidumbre", que va muy ligado a "La Esperanza", el capítulo que lleva el mensaje que este autor panameño desea dejar plasmado en su obra.
Gracias a una narración de una radio local, el grupo decide salir de Puerto Príncipe.
"Yo escuché en la radio, a un señor canadiense, que decía por la radio, que en la mañana, llegaría una avioneta de Cuba y República Dominicana. Lo visualicé como una esperanza para salir y basándonos en eso tomamos la decisión de ir hacia el aeropuerto, un trayecto que en otras circunstancias se realiza en media hora, les tomó poco más de dos".
Asegura que un ángel en forma humana los ayudó. Luego de varios intentos para que alguien los transportara hacia la terminal aérea, un hombre decidió ayudarlo. Pese a que habían estipulado previamente un precio, aquel hombre, que dijo que era abogado de profesión, jamás cobró un centavo.
En este punto, había que tomar una decisión, pagarle a alguien para que los trasladara hacia la frontera y salir de Haití, antes que la situación empeorara. "Conseguimos a un chofer que era medio loco, pero gracias a Dios que era así, porque su conducta nos ayudó a que llegáramos más rápido", asegura este autor.
Cada momento vivido en ese trayecto de más de 6 horas del aeropuerto hasta frontera, queda plasmado en "La Salvación".
La experiencia ha dejado huellas en Puello, quien confiesa que es víctima de algunos traumas, pero que también lo ha impulsado a leer mucho sobre los terremotos.
"A pesar de las dificultades que podamos tener en un momento determinado debemos perseverar para buscar nuestros objetivos", dice este autor de pasada la mediana edad.
Escribir el libro fue fácil, prueba de ello es que sólo se necesitaron 22 días para culminarlo; sin embargo, eso afectó al autor ya que cada vez que leía volvían los recuerdos de lo vivido.
"Yo me trasladaba a la escena. Recordaba lo que vimos, es impresionante", dice.
Este libro tiene un costo de $9.95 y fue presentado en Exedra Book. Está escrito tanto en español como en inglés.
MENSAJE
Su autor afirmar que el mensaje que desea transmitir es claro y sencillo: "A veces nosotros queremos a una persona, nos abstenemos de decirle lo que sentimos. Lo dejamos para mañana y ese día yo me di cuenta que no hay que dejar nada para mañana. La vida es solo un instante; la muerte, una eternidad.
