En el barrio todos saben. En el trabajo todos sospechan y la última o el último en enterarse siempre es uno. Así� es la vida la vida en este Panamá. El esposo se come a todo lo que se mueva y la mujercita de alelá creyendo todaví�a en el amor de pí�o pí�o. Claro, hacemos la salvedad que también ocurre al revés. La mujer se queda tarde en las oficinas y cuando el marido tiene todo el terreno preparado para el romance, la chica le sale con que tiene un hongo o le duele la cabeza.
Para que no te agarren más de congo (a), aquí� te damos estos tips que te ayudarán a saber si huele a quema'o en tu hogar:
Cambio de actitud hacia el cónyuge: menos cariño, menos cumplidos y menos paciencia. Más criticas, más regaños y más enojo.
Su pareja parece estar aburrido de usted y no quiere hacer nada en pareja.
Hay menos intimidad en el matrimonio al punto de que ya casi no existe la intimidad.
Hay gastos irregulares en las tarjetas de crédito o cuentas bancarias.
Extendidas horas de trabajo.
Se aumentan las reuniones de trabajo fuera de la oficina o lugar de empleo.
Viajes de trabajo constantes.
Cambio de perfume, vestuario o ropa interior.
Preocupación excesiva en mantener un fí�sico más joven por medio de ejercicio, dietas, cremas, etc.
Su cónyuge se rehúsa a comunicarse con usted, sobre todo en cuanto a los cambios que están pasando en el matrimonio.
Si esto está pasando en tu vida, ponte mosca y comienza a rescatar ese punto que provocó tal situación, pero lo primero que debes hacer es pedirle a Dios que tome control del asunto y haga ver a tu esposo (a) que está siendo infiel a la familia.
Busquen a Dios, juntos en pareja, y permitan que el Espí�ritu Santo traiga sanidad y restauración a su hogar.