No es un secreto que no hay calle para tantos autos en el país. Eso de hablar de "horas picos" ya pasó a la historia, ahora se habla de "días pico", pues la gran cantidad de vehículos causa gran congestionamiento a toda hora, eso sin contar que las manifestaciones o aguaceros agudizan la situación.
Las personas que han viajado por Centroamérica reconocen que por nuestras calles, no sólo se logran ver autos populares, sino autos 4x4 uno detrás de otro esperando el cambio de luz en los semáforos, lo cual evidencia que la industria automotriz crece a pasos nunca antes vistos, pero �qué pasa con los autos viejos?
Las autoridades no han logrado establecer un equilibrio entre el espacio físico y cantidad de autos, a pesar que reconocen plenamente el grave problema de tráfico que se vive todos los días. No hay un control científico para que la venta de autos en Panamá, tanto los nuevos como los de poco uso que muchas veces salen a rodar con alteración en el kilometraje y �quién regula esto? Muchos clientes ignoran que esto esté pasando, por lo que las autoridades deben estar pendientes para evitar que se cometan estos actos de "maleantería" que lo que hace es saturar más las avenidas de autos en muy malas condiciones, afectando directamente el medio ambiente.
Las cifras son claras: 330 mil autos circulan sólo en la capital, mientras que 640 mil lo hacen por toda la geografía nacional y si no se establecen controles adecuados, muy pronto se tendrá que aplicar la ley que regula la circulación de autos por placas pares o nones.
Hay que reconocer que es positivo que la industria crezca, como de hecho ha superado el año pasado con un 29%, pero tanto la empresa privada y el gobierno deben hacer su trabajo: más calles y más orden.