El alcalde de la ciudad de México, Marcelo Ebrard, pidió perdón públicamente a los familiares de las doce personas, que murieron en una discoteca de la capital mexicana el 20 de junio, tras un operativo policial mal planeado que derivó en tragedia.
La disculpa fue exigida por la Comisión de los Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), la cual concluyó en una investigación que las autoridades abusaron de la fuerza y de las víctimas durante una redada a la discoteca News Divine, que desató una estampida en el interior del local.
En esa avalancha humana murieron tres menores, seis jóvenes y tres agentes por golpes y asfixia, cuando los policías, que buscaron drogas en el local, bloquearon la única puerta de la discoteca para retener a cientos de jóvenes en el interior del local.