El español Rafael Nadal, número uno del mundo, impuso ayer su calidad en la pista 1 ante el francés Paul-Henri Mathieu, al que tumbó en tres sets, por 6-4, 6-2 y 6-2, para convertirse en rival del sueco Robin Soderling en los cuartos de final de Wimbledon.
Nadal, que tardó 2 horas y un minuto en eliminar al francés, es el único representante español que queda "vivo" en el cuadro masculino de este Grand Slam, en el que Soderling eliminó previamente a David Ferrer en cinco mangas.
La última vez que Nadal y Soderling se enfrentaron fue en la final de Roland Garros, en la que el zurdo de Manacor se proclamó vencedor.
Tras haber sufrido algo más frente a sus dos anteriores rivales -el holandés Robin Haase y el alemán Philipp Petzschner-, Nadal restó ayer la importancia al hecho de lograr un triunfo en tres sets: "Lo importante es la victoria y hoy (ayer) ha sido menos duro que en los días pasados, pero todos los encuentros tienen sus momentos complicados".
Nadal, que explicó esta semana que sigue tratándose sus problemas con las rodillas, no sintió nada de dolor en el partido con Mathieu, algo que considera "buenas noticias" con vistas a los cuartos de final.