La Semana Santa es el período sagrado del cristianismo que transcurre desde el Domingo de Ramos hasta el de Resurrección. De este ciclo, el día jueves se conmemora en la Iglesia Católica la �ltima Cena, evento que instituye la Eucaristía.
Entre las actividades de este día se celebra el lavatorio lavado de los pies para recordar el gesto de humildad del Hijo de Dios ante sus discípulos.
Después de la misa, el Santísimo Sacramento se traslada de forma solemne y se reserva en el "Monumento", un altar construido ex profeso y en el que se mantendrá reservado hasta el oficio del Viernes Santo.
Los católicos de todo el mundo acompañarán en esta noche al Santísimo, al tiempo que el altar principal es despojado de manteles, candelabros, crucifijo y demás para simbolizar la desolación de Jesús en la noche en que fue arrestado.
Esta Semana Santa toma vital importancia en Panamá porque nos enfrentamos a malignas corrientes de satanismo que han dejado tragedias, dolor y muerte de personas inocentes.
Para colmo de males aparece un reducido grupo de tatuados, a la mejor usanza de los pandilleros que dicen pertenecer a una secta que representa al Anticristo y que en estos últimos días han realizado un acto público que tuvo repercusiones internacionales, creando un clima de desasosiego entre los creyentes.
No comprendemos cómo este acto ha podido realizarse en público porque aparte
de lo retrógrado sus integrantes han atacado de forma bárbara a la gran mayoría del pueblo panameño, en su mayoría católico, algo que no tiene precedentes en nuestra historia. Deben dar gracias a ese Dios que niegan que no somos musulmanes.
En cualquier día y mucho más durante la Semana Santa, repudiamos esas locuras infernales que en nada contribuyen a la paz y a la necesidad de reforzar nuestros valores cívicos y morales de nuestra sociedad. Buscar notoriedad de esta manera ofende nuestra fe de manera abierta y descarada.
Debemos tener cuidado porque en Jeremías las palabras de Yavé de los Ejércitos: "�Ya se acabó la sabiduría en Temán? �Perdieron su prudencia los inteligentes o se corrompió la sabiduría? �Den media vuelta y huyan, escóndanse bien, habitantes de Dedán, porque voy a dejar caer la ruina sobre Esaú!.
