La más extraordinaria colaboración musical en el siglo XX tuvo lugar un 28 de enero de 1985, cuando 38 de los más famosos artistas estadounidenses -liderados por los cantautores Michael Jackson y Lionel Ritchie- grabaron "We are the World", un himno cuyo lanzamiento el 7 de marzo de ese año, sirvió para recaudar fondos para la lucha contra la hambruna en Etiopía. La canción fue un éxito automático.