El pelotero dominicano Sammy Sosa dio otra demostración de su buena fe y del gran corazón que posee luego de encabezar ayer un reparto de alimentos a varias instituciones filantrópicas dominicanas y a decenas de ancianos.
Sosa, quien este año no las tuvo todas consigo jugando para los Orioles del Baltimore, demostró una vez más el amor por su patria y su gente, esa gente que lo admira y lo idolatra.