No quieren más accidentes en perjuicio de los menores y por ello, decomisarán las bombitas que estén en el mercado de manera ilegal.
Ese es el criterio que tiene la Gobernación de Panamá, ya que ayer emitieron un comunicado en el que se prohíbe la venta de fuegos artificiales por parte de vendedores ambulantes.
"Vamos a perseguir a esas personas quienes violan las leyes al entregarles a los menores de edad aparatos explosivos, los cuales son un peligro para tods las personas", aseveró Erich Rodríguez Auerbach, Gobernador de la provincia de Panamá.
A pesar de ser una tarea difícil de cumplir, estarán en las calles unas 250 unidades en conjunto de la Policía Nacional, SINAPROC y personal de la Gobernación, quienes buscarán acabar de una vez por todas con la venta ilegal de estos productos pirotécnicos.
Con esta medida se quiere acabar al máximo con el peligro que encierra este tipo de artefactos, que cobraron la semana pasada a su primera víctima, cuando un menor de edad sufrió una serie de quemaduras al explotarle uno de estos artefactos.
La máxima autoridad de la provincia de Panamá resaltó que esperan el apoyo de la comunidad y que se denuncie a toda persona que esté vendiendo en la calles estos productos, quienes una vez sea identificada, se le decomisarán de inmediato todos los cartuchos que contengan estos detonantes.
CONTROL DE VERANO
Por otro lado, se conoció parte de las medidas que se adoptarán para los paseos de verano a las distintas playas del país.
Una de ellas, es la que establece que los organizadores no podrán transportar bebidas alcohólicas en los buses, y quienes intenten pasar este tipo de productos alcohólicos, también se les decomisarán. Además, no podrá llevar armas blancas ni de grueso calibre.