Melissa inicia su día como cualquier mujer trabajadora, sale a las 6 de la mañana en bus rumbo a su oficina donde labora hasta las 4 y media. Pero la jornada de trabajo más pesada inicia cuando llega cansada a su hogar.
Agotada debe barrer, trapear, atender a su hijo y preparar la cena para la familia, todo esto mientras su esposo observa cómodamente las noticias en la televisión.
La rutina se repite todos los días hasta que un buen día explota y comienzan los problemas en la relación de pareja. Esta es la realidad de muchos, que debido a la falta de comunicación entran en estas crisis causando mal humor y reproches entre marido y mujer.
Según la psicóloga Nidia García, esta realidad pasa muy a menudo en la mayoría de las parejas. Pero, paradójicamente, gran parte de estas crisis son debido a la falta de comunicación de la mujer con su marido.
"Si ella hablara el tema abiertamente haría que su esposo hiciera un cambio de actitud o se diera cuenta que está siendo injusto y entonces las cosas podrían cambiar", explicó.
Pero la realidad es que no todas las mujeres lo hacen como fue el caso de Melissa. Y es que, no se trata de que la mujer pida ayuda a su pareja en el hogar, sino que se compartan los oficios.
Según la psicóloga, el silencio de las mujeres en estos casos van a ir creando brechas en la comunicación y cuando se decida hablar entonces ella va a estar muy llena de rencor y se crearán los problemas.
A juicio de García, la formula es la comunicación, la mujer tiene que aprender a comunicar lo que siente y hacerlo de manera acertiva en un diálogo con su cónyuge o esposo. "Los hombres cambian, si hay amor los hombres cambian...", puntualizó.