Hoy se cumple un mes de la tragedia donde murieron 18 personas que viajaban en un bus de la ruta Corredor-Mano de Piedra.
En la mente de muchos panameños permanecen las conmovedoras escenas de aquella tarde del lunes 23 de octubre, en donde el bus 8B-06, conducido de Próspero Ortega, se incendió.
La tragedia llevó al reemplazo de Angelino Harris, de la dirección de la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT), por el viceministro de Gobierno y Justicia, Severino Mejía.
Estrictas órdenes para mejorar el servicio a los usuarios y operativos para garantizar que las unidades de servicio brinden la debida seguridad a los pasajeros, han puesto en ejecución las autoridades de la ATTT para ordenar la casa, las cuales aún son vistas con incertidumbre por quienes usan el transporte público.
Desde que Severino Mejía tomó posesión en presencia del presidente Martín Torrijos el 26 de octubre, se le otorgó un período de gracia a los conductores para que pusieran en condiciones sus unidades, a más tardar el 27 de noviembre.
La fecha de cumpleaños está cerca y gran parte de los transportistas se han quejado de los operativos y dicen que los están persiguiendo, pero aseguran que el próximo lunes tendrán sus unidades listas.
A un mes de esta catástrofe, hay tres personas detenidas: el conductor del bus, el propietario y el mecánico, quienes han reiterado la inocencia de los cargos, pese a la muerte de las 18 personas calcinadas y 25 heridos.
El incendio del bus, el cual según informes del Cuerpo de Bomberos y la dirección de explosivos de la PTJ, se debió a un "puente" en el sistema eléctrico de la unidad, dejó un amargo sabor en la población, la cual pide justicia y castigo ejemplar para todos aquellos que resulten culpables de esta tragedia, la cual hoy cumple un mes de sucedida al frente de las instalaciones del templo Hossana.