Una uña enterrada ocurre cuando una porción de la uña del dedo del pie dobla la piel y se incrusta en el tejido suave causando, en muchos casos, dolor, enrojecimiento e hinchazón.
Puede darse en cualquiera de los dedos del pie, pero con frecuencia ocurre en los dedos gordos.
Causas: Cortar incorrectamente la uña del dedo del pie (redondeando los bordes de la uña en lugar de cortarla de forma recta), usar zapatos apretados o de tacón muy elevado, crecimiento anormal de los dedos de los pies, mala higiene del pie, traumas repetidos en los dedos del pie debido a actividades deportivas.
¿COMO SABER QUE ESTA ENCARNADA?
- Dolor (a veces grave)
- Enrojecimiento en las uñas, pliegue lateral.
- Hinchazón alrededor de la uña.
- Sensibilidad
- Inflamación
- Infección
Las personas que tienen un mayor riesgo de desarrollar uñas encarnadas son las personas con artritis, las deficiencias del sistema inmunológico, las neoplasias (tumores), la obesidad y los trastornos circulatorios.
REMEDIOS POPULARES
- Colocar un diente de ajo o un pedazo de cebolla en la uña enterrada y vendar el dedo por la noche.
- Remojar las uñas afectadas con el jugo de un limón.
- Poner el pie en una cálida bañera de agua salada por 15 minutos y luego vendar el dedo afectado por toda la noche.
- Empujar suavemente la piel fuera de la uña.
- Remojar el dedo afectado con cinco gotas de tintura de caléndula diluida en 1/2 taza de agua caliente por 15-30 minutos. Luego, envolver el dedo del pie en pedazo de tela de lino.
Es importante cortar la uña de forma recta y nunca ovalada, ya que puede curvarse e incrustarse hacia la piel de los lados. Siempre deje los bordes exteriores paralelos a la piel.