El presidente del Comité Olímpico de Chile (COCH), Neven Ilic, admitió que un caso de corrupción descubierto en la Subsecretaría de Deportes de su país pudo haber influido para que Santiago perdiese a manos de la colombiana Medellín la sede de los juegos Odesur 2010.
"Me gustaría que no, pero todos saben lo que pasó, me lo dijeron y lo comentaron, hemos dado un triste espectáculo", dijo Ilic a Efe, aunque matizó que no quiere "creer que esa sea la razón".
"La verdad es que no entiendo nada", comentó el dirigente.
En la Subsecretaría de Deportes (ChileDeportes) se descubrió la distribución de unos 400 millones de pesos (754.000 dólares) en proyectos inexistentes, lo que originó acciones judiciales y desató sospechas de que el dinero pudo ser desviado a campañas electorales en las elecciones parlamentarias del año pasado.
Como secuela del escándalo, del que la presidenta Michelle Bachelet dijo que perseguirá a los corruptos, "caiga quien caiga", el Parlamento se ha negado hasta el momento a aprobar el presupuesto de ChileDeportes para el próximo año. "No entiendo nada, no sé cómo toman las decisiones", insistió hoy Neven Ilic al comentar la derrota de Santiago de Chile frente a Medellín.
DATO 30%
Chile ofreció financiar un 30 por ciento más de atletas, 50 pasajes adicionales y alojamientos por país que Medellín.