El desempleo está creciendo en Panamá. De agosto de 2008 a agosto del presente año, el número de desempleados se incrementó en 17 mil plazas. Aunque sólo creció un punto porcentual al pasar de 5.6 por ciento a 6.6 por ciento, esa cifra debe alertar a los técnicos del gobierno.
El año pasado el número de desempleados era de 84 mil personas y ahora se ubica en 101, 103, con provincias como Colón donde la tasa de desempleo es del 10.4%, lo que explicaría de alguna forma los el nivel de criminalidad que existe en esa región.
La Población Económicamente Activa (PEA) de Panamá pasó de dos millones 356, 900 personas en agosto del 2008 a dos millones 403, 651 para este año.
Sin duda que la crisis mundial está causando efectos en el país; ya afectó el monto de las inversiones y ahora genera incrementos en el desempleo. Las consecuencias en Panamá son menores que en otros países, como Estados Unidos, donde grandes bancos y compañías han ido a la quiebra y el desempleo ya es de dos dígitos, pero mal de otros, es consuelo de tontos.
Mientras la economía global se recupera, el gobierno tendrá que poner en marcha los macroproyectos, donde se utilice el mayor número de mano de obra nacional. Esa debe ser la prioridad de la actual administración. Sus esfuerzos deben estar concentrados en esa línea y en dotar al país de seguridad; hacer lo contrario sería como perder el bosque por contemplar los árboles.