Un producto que tiene la mala fama de no poder ser cultivado en tierras bajas es la cebollina. Conversamos con el ingeniero agrónomo, Manuel Madrid, quien asegura que con un buen sistema de riego se puede mantener durante todo el año.
Este miembro del grupo de trabajo del Patronato de Nutrición actualmente trabaja en zonas calientes durante un periodo de 60 días, para luego sacarlos al mercado donde la comunidad china es su mejor cliente.
También conocida como cebollín se consume crudo en ensaladas, cocinado, preparado en diversas salmueras y también como condimento culinario; deshidratado, se emplea mucho para aromatizar sopas y estofados; es ampliamente usado en la preparación de la comida china.
Un producto que podemos encontrar en el "recao" y que requiere de cierto grado de fertilización química para obtener buenos resultados.
Se siembran dos unidades o hijos (pequeñas matitas) que se van engrosando y aumentando el material vegetativo.
Se siembra en dos metros cuadrados, y puedes tener producción durante todo el año.
La cebollina se siembra en la época de invierno, y se mantiene por medio de los sistemas de riego (por goteo o por aspersión) durante los 12 meses del año.
Este vegetal se siembra en forma directa y a chorro corrido, el distanciamiento es de 20 y 25 cm entre surco. Después de la siembra, hay que poner una capa liviana de abono orgánico y regar; las semillas germinan entre los 6 y los 8 días, el raleo debe hacerse a los 15 días después de la siembra, y dejan una población de más o menos 60 a 80 plantas por metro lineal.
MOMENTO ESPERADO
La cosecha se iniciará a los 75 días de sembrado, o cuando los tallos alcancen un diámetro de 1 cm, previo a la cosecha (2 a 3 semanas antes) deberá cubrirse de tierra con el objeto de tener un tallo largo, lo más blanco posible; después de que se ha cosechado es necesario eliminar la hoja exterior (más vieja) y cortar las raíces teniendo cuidado de no hacer el corte muy alto para evitar que el tallo se abra.