La solución del problema fue momentánea, porque aún tienen que lidiar con el desbordamiento de heces que proviene del sistema de alcantarillado público.
De nada les valió a los residentes del sector A de Cerro Batea, San Miguelito, haber cerrado la vía exigiendo respuestas, ya que siguen igual o peor. La "invasión" de aguas negras alcanzan sus patios, veredas, áreas de esparcimiento y escuela.
Emérita de Jiménez, directora de la escuela Samuel, manifestó su temor de que se registre un brote de enfermedades, pues las aguas servidas alcanzan parte del centro escolar.
La educadora aduce que a pesar de que la cuadrilla del IDAAN reparó el daño, cada vez que llueve la situación es repetitiva.
DATOS
La situación es alarmante. En una escuela han abierto una zanja para evitar que las aguas lleguen a lo interno del colegio