Puede que los nombres cambien, pero el país sigue siendo el mismo. China es amo y señor de los clavados en los Juegos Olímpicos.
Guo Jingjing ganó ayer cómodamente la competencia femenina de trampolín, la quinta medalla de oro de los clavadistas chinos en Atenas 2004. Su compatriota Wu Minxia se llevó la plata, y la rusa Yulia Pakhalina la de bronce.