El gobierno de Colombia rechazó nombrar negociadores para un intercambio de secuestrados por rebeldes presos, en la continuación de una puja que mantiene con las FARC por el canje y en el que, en una semana, las partes han intentado imponer sus reglas de juego.
El alto comisionado para la paz del gobierno, Luis Carlos Restrepo, aseguró que él es el único autorizado para negociar el acuerdo humanitario, con la facilitación de Suiza y a través de medios como Internet.
"La única persona facultada para llevar a cabo acercamientos y negociaciones con los grupos armados ilegales es el comisionado de paz, eso está en mis manos. Tenemos un facilitador que es Suiza, y hemos propuesto como canal de comunicación Internet", dijo Restrepo.
Su pronunciamiento fue la respuesta al rechazo de las FARC, anunciado el domingo, a la oferta que lanzó el gobierno el 18 de agosto de entregar a 50 rebeldes presos a cambio de 22 políticos, 34 militares y policías, y tres estadounidenses secuestrados por ese grupo.
Tras calificar la oferta como "absurda", las FARC exigieron al presidente Alvaro Uribe designar a sus delegados para negociar "cara a cara" con los tres comandantes de la organización nombrados hace seis meses para tal fin.
Para las FARC debe decidirse en una negociación cuántos y cuáles serán sus miembros a excarcelar, por lo que no aceptan la condición impuesta por el gobierno de que los rebeldes que libere deben desmovilizarse y estar acusados o condenados únicamente por rebelión y no por crímenes de guerra.