Roderick Giono, de 35 años, padece de una mal formación congénita en ambas piernas que jamás le han permitido caminar, sin embargo su mayor encanto es pasear por las calles y saludar a sus amistades.
Dijo que gracias al ingenio de una persona en el anterior INAFORP, ahora INADEH, que le construyó en la provincia de Chiriquí un triciclo, puede movilizarse por todas las calles de la ciudad de Santiago, donde tiene conocidos o amigos que visita todos los días.
Para este joven veragüense, sus condiciones físicas no son obstáculo ahora para pasear o realizar cualquier tipo de labor que le permita ganarse la vida de manera honrada, ya que algunas personas le solicitan los servicios de mensajería o de cuidar cualquier propiedad.
Roderick dijo que desea un trabajo permanente para sostenerse y no depender de otras personas, pues asegura que puede vender lotería, resguardar las entradas de las instituciones estatales, o cualquier otra función, si sus manos están sanas.
Comentó que recorre casi toda la ciudad de Santiago en este aparato y no se siente cansado, incluso muchas veces ha viajado a distritos apartados como La Mesa, Cañazas, San Francisco, en pocas horas, pero viaja de día que es menos peligroso. En las noches no se atreve por la velocidad de los carros.
Personas como éstas son las que realmente el Gobierno debe considerar para la Red de Oportunidades, para aliviar sus condiciones de vida.