Más de 500 casos positivos de malaria se han presentado en el área fronteriza de Guabito y la región de Changuinola en la provincia de Bocas del Toro, lo que representa una situación delicada para la población.
Juan Esquivel, subdirector nacional de control de Vectores para Chiriquí y Bocas del Toro y la Comarca Ngöbe Buglé, explicó que el problema obedece a la constante migración de los indios procedentes de la región comarcal y por la gran cantidad de panameños que trabajan en las plantaciones bananeras de las áreas fronterizas de Costa Rica donde han detectado casos de malaria.
Estas personas viajan semanalmente al lado panameño y viceversa, lo que impide que las autoridades del Ministerio de Salud puedan controlar la situación porque se ve interrumpido el tratamiento continuo que se necesita aplicar en estos casos para controlar la enfermedad.
Por su parte, Vicente Ballard, director nacional de Epidemiología del MINSA, reconoció que a pesar de los casos detectados en Changuinola, aún falta cumplir con el roceado total de las viviendas y al momento de lograrlo, consideran que debe desaparecer la malaria.
SECTORES MAS AFECTADOS: EN FRONTERA Y COMARCA
La mayor cantidad de estos casos se presentan en el cordón fronterizo de Guabito y Las Tablas. En el área de la Comarca Ngöbe Buglé se presentan Santa Catalina, Río Chiriquí, Togobe, Kankintú y Guaribiara.