América Latina concurrirá a los Juegos Olímpicos de Atenas-2004 totalmente relegada en los pronósticos, que apenas favorecen a un par de velocistas de élite, y acompañada por el viejo estigma de su pobreza, económica o deportiva.
La vigesimoquinta edición de la gran cita del deporte mundial no será diferente para una región sin recursos que juega sus mejores cartas a deportes colectivos de mucho arraigo popular como el fútbol o el béisbol.