Un evento sin precedentes fue la visita del narrador de la lucha libre profesional de la World Wrestling Entertainment (WWE) Hugo Savinovich a nuestro país, por invitación de la Comunidad Apostólica Hosanna.
Crítica conversó en exclusiva con este gran narrador y triunfador en Jesucristo. Para lograrlo, hubo que atravesar diversos obstáculos, pero se logró el objetivo y "el hijo de doña Mélida", con gusto conversó con nosotros, luego de un "Seminario para Líderes", dictado especialmente para los jóvenes.
Crítica: Háblanos sobre tu vida
Hugo Savinovich: Nací en Guayaquil, Ecuador, me convertí en luchador profesional a los 14 años, Estados Unidos fue mi primera plaza, he luchado en el Caribe, Japón. Fui Campeón Mundial Semi Completo, Texas; Campeón del Caribe en Puerto Rico, en Parejas en República Dominicana, Campeón de Nueva Jersey.
C: ¿Alguna vez luchaste en la WWE?
H.S.: No en Estados Unidos, sino en el Caribe. Luché contra Bob Backlund, Red Tyler, Bret "Hitman" Hart, su primera lucha fuera de Canadá fue contra mí y tengo una foto de él cuando era flaquito y yo le aplicaba un tirabuzón, él no quiere saber de esa foto. (Risas)
C: Subiste como la espuma, pero qué le hizo buscar a Cristo, y seguir subiendo con la ayuda de Él?
H.S.: Una vez que mi vida estaba vacía y había caído en vicios, estando en la cárcel dije "Si tú, Jesús, existes, este es el momento que entres en mi vida", y a pesar de estar preso, fue la primera vez que me sentí libre.
C: Si tuvieras que luchar con el diablo ¿Qué llave le aplicarías?
H.S.: Le aplicaría tres suplexes alemanes y le entraría a patadas hasta cansarme, porque él es un derrotado.
C: ¿Cómo es el mundo de la WWE?
H.S.: Ahora es lindo, al principio, cuando recién me convertí, había muchas peleas y gente que estaba en contra de lo que yo hacía, pero una vez que Dios entró a la WWE, todo fue diferente. Luchadores como Shawn Michaels, Molly Holly y Eddie Guerrero han aceptado a Cristo.
C: ¿Cómo es su relación con Vince, Linda y los demás jefes, narradores y otros empleados?
H.S.: Preciosa, como una familia, me han permitido predicar y entienden que Dios ha hecho un cambio en mi vida.
C: ¿De dónde salió "Atángana"?
H.S.: Luché en mis inicios para un promotor mexicano llamado Arturo Mendoza en Puerto Rico, uno de los genios de la narración. Le caí bien y me decía: "chiquitín, usted es luchador ahora pero algún día tendrá el talento para hacer lo que yo hago", y me dice la palabra "acángana" (de acanganazo), que la usaba el Gran Combo de Puerto Rico, pero debe susar "Atángana" porque nadie la utiliza.
C: Mejores y peores momentos dentro de la WWE
H.S.: Mejores los que vivo ahora, porque gano más que antes, soy respetado, porque Cristo está en mi vida, he visto como la empresa ha prosperado, mi relación con los luchadores es excelente. Peores, cuando descuidé mi profesión y fui a la cárcel.
C: Es apretada la agenda de viajes alrededor de Estados Unidos, ¿cómo es?. ¿Van en las giras que han hecho a Europa y los otros continentes?
H.S.: Ya no viajamos tanto, viajo más en las campañas. Nuestro trabajo es tanto que la señal la pasan en vivo al estudio y allí nosotros hacemos la narración. Cuando eres un profesional, nos sentimos como en el coliseo. No podemos estar en todos los eventos, porque en español sólo estamos nosotros. No podemos ir a las giras a otros continentes, como Europa.
C: Para tí, ¿cuál es el mejor luchador que actualmente pertenece al roster de la WWE?
H.S.: "Nature Boy" Ric Flair por ser una leyenda y Batista por su impacto, aunque muchos me contradigan.
C: ¿Qué tan cierto es eso de que los luchadores actúan, a pesar de que se ve sangre, horribles golpes y graves daños? (muerte de Owen Hart).
H.S.: Nosotros no le decimos la gente que presentamos lucha libre. Esto es entretenimiento, espectáculo, y nosotros no creemos en dar violencia por darla, sino dar un espectáculo en donde haya de todo, para toda la familia.
C: ¿Quién inventa los storylines, como nacen y mueren?
H.S.: Yo creo que los luchadores ayudan mucho. Los mejores escritores son los mismos fanáticos, según la reacción del público, así van